Reseña de El fantasma
del rosario, de Marisa Vicentini (Muerde Muertos, 2014). Por José María
Franchino Arnaiz para La
Palabra de Ezeiza (*)
El fantasma del rosario es la primera novela publicada de
Marisa Vicentini, quien, sin duda, ha leído atentamente a los grandes maestros
de la intriga sobrenatural de la línea anglosajona, y en esta ocasión, se ha
jugado por contar con una historia cargada de ingredientes clásicos, en un
ámbito claramente local.
Apelando al terror, lo fantástico y lo policial, la autora
retrata las peripecias de una mujer (Micaela) que ha perdido recientemente a su
hijo y a sus padres, y debe luchar para no caer en la depresión y reconstruir
su vida. En ese tránsito, se muda a la una casa en Villa Hermosa, donde suceden
cosas extrañas —entre ellas la aparición de un rosario—, y todo parece
indicarle que recién cuando logre estar en paz con el pasado podrá pensar en el
presente y su futuro.
Para alcanzar su meta, la protagonista contará con la ayuda
de un fiscal comprometido con la verdad y un ex novio —que volverá a su vida
luego de haber sido cura y dejado la vida sacerdotal—, con quien retomará un
romance que, tal vez, pueda prosperar en medio de tanto dolor.
El fantasma del rosario es una historia bien contada, que,
por un lado, nos propone una entretenida y amena lectura, y por otro, como dice
el escritor Fernando Figueras, nos hace recordar que siempre vale la pena
luchar, porque “ni siquiera la desdicha puede ser permanente”.
(*) Jueves 12 de marzo de 2015.
(*) Jueves 12 de marzo de 2015.
La Palabra de Ezeiza, página 6, jueves 12 de marzo de 2015. |