Haikus Bilardo (Muerde Muertos, 2014), de Fernando Figueras y José
María Marcos, e ilustrado por Matías Berneman, es una evocación sentimental y
apasionada de aquellos dos mundiales de fútbol (Méjico 1986 e Italia 1990) en
los que la
Selección Argentina , con la dirección técnica del doctor
Carlos Salvador Bilardo, ganó el primero y fue subcampeona en el segundo.
El haiku es una forma de poema que aparece y se desarrolla
en Japón desde el siglo XVI. Algunos estudiosos de la literatura de Oriente ven
en su origen al antiguo katauta, que oscilaba entre la forma de tres versos
formados por cinco sílabas, seguidas de siete y finalizadas en otras cinco o,
en su defecto, finalizada en otras siete. El haiku toma la primera de estas formas, ya que su efecto poético
resulta ser mucho más impactante. La esencia del haiku es la relación de lo
dicho con lo silenciado, de la palabra con la emoción, de la pausa y la sílaba
con el recuerdo de lo vivido, de la nostalgia, de la comparación entre lo que
fue y lo que podría haber sido, así como la correspondencia del hombre con la
naturaleza.
Las diecisiete sílabas del haiku invaden al lector desde una
imagen del presente que induce a una evocación profunda y que se vinculan sin
oposición, directamente, a sus sentimientos.
En Argentina, uno de sus mayores cultores fue Jorge Luis
Borges, quien en El oro de los tigres y
en La cifra incluye varios haikus
tradicionales (quizá no sea una casualidad que, más allá del poema que da
título a la segunda obra, “la cifra” de haikus sean diecisiete, como las
sílabas que los componen.
La vieja mano
sigue trazando versos
para el olvido.
Jorge Luis Borges
Desde mediados del siglo XIX y principios del XX, los poetas
japoneses comienzan a reinventar la escritura de haikus, manteniendo su esencia
de convocar a lo interior desde el afuera, pero tomándose ciertas “licencias
silábicas”. A estas tendencias se las conoce como Shintaishi y Shinkeikoo.
En el campeonato mundial de 1986, en Méjico, el director
técnico del seleccionado argentino presenta una idea táctica que venía
desarrollando desde 1982, cuando entrenaba a Estudiantes de La Plata : el 3-5-2, que, hasta
el presente, veintiocho años despues, es considerada como la última gran
variante táctica en la historia del fútbol.
En Haikus Bilardo,
Fernando Figueras y José María Marcos le escriben desde el corazón a los
logros, a las desventuras, a los infortunios, al heroísmo, al barrilete cósmico
de Villa Fiorito, a las manos mágnéticas de Goycoechea, al “error” de Codesal,
a la certera definición de Burruchaga, a esas dos finales, a esos momentos extraños y, lamentablemente,
tan espaciados en el tiempo, en los que por más diferente que pensemos u
obremos, nos sentimos unidos, hermanos, argentinos.
Pero, como buenos ejemplares de esa especie literaria que se
juntan y se mezclan en la editorial Muerde Muertos, los autores desbordan el
molde y van más allá: logran que la emoción del antiguo haiku tradicional del
5-7-5, aparezca en esta conmemoración del siglo XXI: el haiku Bilardo del
3-5-2.
A la ficción, al homenaje, se le agregan anécdotas y
testimonios, tanto de protagonistas como de testigos.
Alemania (*)
Celestes,
verdes, delirio,
gritos.
Azteca,
cancha jamás
nunca.
Equipo
de Rummenigge,
duro.
Un centro
de Burru, ¡gol
Tata!
Enrique,
Diego, Valdano,
brillo.
Dos centros,
dos goles verdes,
llanto.
El sueño
se desvanece,
Diego.
¿Por qué
nos dejaste, oh,
padre?
Que se
agriete el mar
rojo.
¡La magia
de Dios y gol
Burru!
¡Equipo
campeón del
Mundo!
¡Bilardo,
Argentina, oh,
haikus!
(*) Narración poética del encuentro Argentina 3-Alemania 2 (Mundial México 86).
(*) Narración poética del encuentro Argentina 3-Alemania 2 (Mundial México 86).
José María Marcos es autor de las novelas Recuerdos
parásitos (2007) y Muerde muertos (2012), las dos escritas con su hermano Carlos, y el libro de
cuentos Los fantasmas siempre tienen hambre (2010). Es Magíster en Periodismo y
Medios de Comunicación.
Matías Berneman, el creador de los haiga (dibujos a la tinta
que acompañan a los haikus y los completan), además de ser licenciado en
Psicología es dibujante e ilustrador. Fue uno de los artistas visuales que en
2013 formaron parte del homenaje a Alberto Laiseca: iluSORIAS.
Para finalizar, unas palabras de Sergio Olguín sobre Haikus Bilardo: “...los haikus bilardistas
están vivos y fueron escritos para mayor gloria de una selección inolvidable.
Si dentro de unos siglos estallaran los sistemas electrónicos, se borraran
todos los archivos digitales, la humanidad tendrá estos versos para recordar
dos momentos de memoria, junto a la
Odisea o el Ramayana”.
Y tres líneas sacadas de contexto, pero que ojalá sean una
premonición para lo que viene pronto:
Y el bando
verde amarelho
sufre.